miércoles, 11 de diciembre de 2013

SECUESTRO SIN RESCATE

Desde la profunda crisis del 98, hablo del siglo XIX, España como concepto es un problema, que para Ortega y Gasset, por ejemplo, ya en 1921, caracterizaba por un déficit de vertebración, y que con la Constitución vigente, como casi podemos ver a diario, en forma alguna se resuelve con la puesta en marcha el Estado de las Autonomías que nos rige. Pero la Región de Murcia, con la aprobación de su Estatuto en el 82, se quiera o no, tiene la competencia absoluta en materia de arquitectura y urbanismo. Han transcurrido desde esa aprobación ya más de 30 años y en consecuencia podemos y debemos preguntarnos por el estado de la arquitectura y del urbanismo en esta Región.

Esta será la tesis: la arquitectura, y el urbanismo también, ha terminado completamente secuestrada por un peligroso conglomerado de agentes públicos que se han  terminado aprovechando de la crisis económica actual para terminar de constituirse y actuar pasando casi desapercibidos.

El conglomerado público se ha ido constituyendo progresivamente, adquiriendo cohesión con el paso del tiempo a base de expulsar los elementos centrífugos e incorporar los centrípetos, pero hoy se puede decir que ha adquirido su completa madurez y su perfil se reconoce con toda nitidez. El conglomerado, como todo conglomerado se compone de elementos diversos, entre los que destacan: técnicos, políticos y altos funcionarios, nombrados en rango creciente de relevancia. Técnicos, fundamentalmente arquitectos. Políticos, en todos sus cuadros: concejales, alcaldes, directores generales, consejeros. Y altos funcionarios tipo: interventores, secretarios, tesoreros, etc.

El conglomerado, que me atrevo a denominar como “tormo”, tiene por principal misión adoptar la práctica totalidad de las decisiones públicas que tienen que ver con estas materias, con independencia de que su ámbito de acción se pueda extender a otras áreas también de su competencia, y, precisamente, en la naturaleza de las decisiones que adopta puede reconocerse el odio profundo, íntimo, que profesa a la arquitectura y el urbanismo. Por eso puede hablarse de secuestro porque quienes tienen la obligación de impulsar una materia dada actúan por el exterior de los criterios que le corresponden. Si en algún momento se clamó por la muerte del urbanismo o de la arquitectura, como una reivindicación, hoy el urbanismo o la arquitectura, aquí, son cuerpos encarcelados, y vigilados por quienes tienen la obligación de su cuidado y desarrollo.

No hay tiempo para desarrollar esta interpretación de forma exhaustiva, científica o razonadamente técnica, pero creo que tres ejemplos pueden al menos hacer pensar que parte o todo de este secuestro se está produciendo. Un secuestro, por cierto, sin rescate, porque no es una razón económica la que los moviliza, sino estrictamente emocional. Pero vayamos a los ejemplos.

Ejemplo 1: Lorca.
El terremoto de Lorca de mayo de 2011 destrozó una parte importante de la ciudad y pronto se llegó al consenso de su reconstrucción, reuniéndose para ello cientos de millones de euros, si sumamos las aportaciones de las diferentes vías que están concurriendo. Toda la reconstrucción de Lorca ya está en marcha en un tiempo relativamente breve, comparado por ejemplo con el terremoto y tsunami de Japón de marzo del mismo año, una comparación, por cierto, muy reveladora en diversos aspectos. Pero de qué reconstrucción estamos hablando. Voy a leer la nota de prensa del propio Ayuntamiento de Lorca cuando informa de las mejoras introducidas en el proyecto de reconstrucción del último edificio que quedaba pendiente:

22/11/2013.
El inicio de las obras de reconstrucción de un nuevo edificio en La Viña eleva la cifra de viviendas en reedificación a 800

El Alcalde de Lorca, Francisco Jódar, ha asistido esta mañana al acto de inicio de obras para la reconstrucción del edificio “Granada”, unas de las construcciones que tuvieron que ser derribadas a consecuencia de los daños provocados por los terremotos del año 2011. Este gran edificio, el último en ser demolido en el Barrio de La Viña, comienza su reconstrucción y lo hace con el objetivo de ser mucho mejor que antes de los seísmos. Se reconstruirán las 48 viviendas y los 4 bajos comerciales, pero además los vecinos dispondrán de más plazas de garaje, mejoras constructivas y decorativas, viviendas más eficientes en cuanto a energía, acústica o aislamiento, y todo ello en un edificio más sólido. Con el comienzo de las obras en el Edificio Granada, las viviendas en reconstrucción superan las 800, además de las 70 que ya han vuelto a ser habitadas. Casi todos los edificios de La Viña están en pleno proceso de reconstrucción, algunos en un estado muy avanzado. La reconstrucción de La Viña va a toda velocidad conformando un nuevo barrio con edificios mejores y más fuertes. Por mi parte, quiero felicitar a todos los vecinos del Edificio Granada, comenzando por el Presidente de la Comunidad, nuestro querido Pedro Ayala, y siguiendo por cada una de las personas que aquí vivirán porque han sido ejemplo de unión para conseguir el objetivo deseado por todos. Han superado cualquier tipo de obstáculo y todos sus esfuerzos tendrán la justa recompensa de poder volver a casa muy pronto, a una casa que será mejor.

El Alcalde ha anticipado que de manera inminente comenzarán las obras de regeneración del Barrio de La Viña, que supondrá una actuación integral sobre un área de casi 100.000 metros cuadrados que incluirá la renovación de servicios soterrados, creación de más zonas verdes, instalación de nuevas luminarias y mobiliario urbano, calles más accesibles, nuevos espacios vecinales, más plazas de aparcamiento,… Todo ello será posible gracias a una inversión de 5´8 millones de euros por parte de la Comunidad Autónoma que permitirá configurar el mejor barrio de toda la Región de Murcia.

Los datos del nuevo edificio. Se trata de un inmueble ubicado en el Barrio de La Viña, en concreto se reconstruirá en la Avenida de La Salud, números 2 y 4. Serán reedificadas las 48 viviendas existentes antes de los seísmos, distribuidas en seis plantas y que conservan las mismas dimensiones y orientación que las que tuvieron que ser demolidas. También se reconstruyen los cuatro bajos comerciales preexistentes que conservan la misma ubicación aunque pierden un poco de superficie debido al aumento de espacio en zaguanes, escaleras y ascensores para adaptarlos a la normativa actual. Esta nueva construcción contará con mejoras muy importantes con respecto a la demolición que fuera demolida como es el caso de:
Una planta de sótano adicional para plaza de garaje
Cociente sísmico superior a la normativa vigente.
Calificación energética de categoría “B”.
 Fachadas con aislamiento térmico y cámara de aire ventilada.
Carpintería metálica de acero inoxidable y aluminio con rotura de puente térmico y triple vidrio.
 Aire acondicionado y calefacción en todas las viviendas.
Puerta acorazada de entrada a cada vivienda.
Puertas interiores de roble, alicatados de Porcelanosa, suelos interiores de gres porcelánico o pavimento laminado, cocinas totalmente amuebladas con electrodomésticos incluidos.

Ejemplo 2: El planeamiento general
Me atreveré a asegurar que todo el planeamiento general de la Región de Murcia, todo, absolutamente todo, es obsoleto, desproporcionado y manifiestamente maléfico. Pues bien no existe, al menos que yo conozca, la menor intención de revisarlo.

Ejemplo 3: Operación plastificado
Que plastificar la ciudad sea el procedimiento adecuado para alcanzar el enunciado objetivo de embellecerla, resulta como mínimo paradójico, en un mundo pendiente de la sostenibilidad. Leeré, para acabar, una noticia al respecto de ayer mismo publicada en el periódico de La Verdad:

Nuevos vinilos cubrirán un solar de San Pedro y los cines Floridablanca.
El entorno de la iglesia de San Pedro -sede de la cofradía del Santísimo Cristo de la Esperanza, María Santísima de los Dolores y del Santo Celo por la Salvación de las Almas- y el local que ocuparon los cines Floridablanca, en El Carmen, contarán en breve con nuevos vinilos decorativos a petición de las juntas municipales. En el caso de San Pedro, la Concejalía de Calidad Urbana e Infraestructuras pretende cubrir las vallas de obra de un solar ubicado en la misma plaza de San Pedro, donde se pretende levantar un nuevo edificio de viviendas. Las imágenes seleccionadas por el fotógrafo Joaquín Zamora, y a las que la concejal Ana Martínez Vidal le ha dado el visto bueno tras el beneplácito del alcalde, corresponden a la Semana Santa murciana, y en ellas figuran detalles de 'La Cena' de Salzillo, una de las obras cumbre de la imaginería barroca, que pertenece a la Cofradía de Jesús; escenas de penitentes, así como detalles de monas, caramelos, palmas, bocinas.

Para cubrir los degradados bajos de los cines Floridablanca, cerrados al público en enero de 2006, se ha elegido una imagen en gran formato del interior del Real Casino de Murcia. La edil Martínez Vidal asegura que se ha pedido permiso al propietario y ha autorizado la actuación. «Como en otras zonas, lo que se pretende con estos elementos es mejorar la visión de entornos comerciales que puedan verse degradados por tener un solar en obras o un local cerrado. Así hemos actuado ya en Jabonerías, en Trapería, en la plaza de Las Flores y en Calderón de la Barca», expone la edil popular, quien apunta que el vinilo de la calle Serrano Alcázar se ha retirado, ya que han empezado las obras para levantar un edificio, aunque será trasladado a uno de los laterales del antiguo inmueble de La Oca, en la calle González Adalid.